Mundial Francia 2023
Francia 2023
El otro mundial
Es hora del balance, más allá si el scrum anduvo regular, bien o muy bien, o si estadísticamente Los Pumas demoraron menos que el resto de los equipos en distribuir el juego desde los rucks.
Es hora del balance desde otra mirada, dejando por momento de lado si el centro de la cancha respondió o no a la altura de las circunstancias, si la elección de la pareja de medios fue o no la correcta; si los tackles fueron del todo contundentes o les faltó ser más “picantes”.
Es hora de rendir cuentas más allá que la táctica y estratégica no se haya visto, porque seguramente debe haber existido en el plan de juego que casi nunca apareció.
La otra cara
El balance pasa por remarcar la otra cara del mundial, lejos de la efervescencia del hincha, de la pasión desmedida, del provincianismo, y del sentimiento de argentinidad que muchas veces aleja del análisis real, el fin que tiene tamaña competencia es ser protagonista también fuera de la cancha.
Foto: Prensa UAR
En ese sitial, donde también se busca ganar fuera del verde césped, la Unión Argentina de Rugby debe diferenciar que le trae a sus arcas el esfuerzo de los jugadores que no fueron el centro de atención (lamentablemente) de todo el mundial, ya que parte de la gran atención estuvo y está puesta en interrogantes que el pensamiento invita preguntarnos y preguntar dentro de la diversidad de situaciones que no se aclaran. Que vienen de la toma de decisiones que se cocinan afuera del campo de juego, pero luego terminan influyendo dentro del mismo.
El pueblo quiere saber
El botón de muestra para decir esto es, que tomando como medida válida las diferentes columnas de opinión, análisis periodísticos, y porsupuesto, la voz de la gente en la opiniones en redes sociales y comentarios debajo de las notas, no podemos mirar para otro lado y hacernos los desentendidos en el momento del análisis.
No hay forma de obviar que la gente en su mayoría se dio cuenta de que alentar a Los Pumas no los deja afuera a la hora de opinar sobre su gustos, justicias e injusticias. Por lo contrario, les da derechos, cuando la mirada no es con el corazón. Ellos son el termómetro de lo bueno y lo malo que pasa. En nuestro caso, son los lectores, los que en público o privado, también nos hacen pensar. Subestimarlos es un error. Nombrarlos a todos, imposible.
Algunos interrogantes
Por eso, y desde otro lugar que no pertenece al juego en sí, pero influye, nos preguntamos…
Pensando en brindar claridad ¿Cuál es ganancia le queda la UAR de todo esto? ¿Pueden blanquear los números y qué destino tendrán dichos ingresos?.
Dentro de la distribución para sus clubes que sufrieron y aún sufren duras situaciones económicas tras las pandemia y que perdieron jugadores y socios por no poder costear los gastos o por que no tienen incentivos, ¿cuánto es destinado al rugby amateur?¿O todo va para la estructura profesional?.
Foto: Prensa UAR
Pensando en que la raíz de rugby argentino es amateur, ¿Qué inventivas tendrán a nivel dirigencial para mejorar, jerarquizar o poner en valor los torneos provinciales y nacionales dentro de una mejor competencia y buscando que el éxodo de jugadores no siga avanzando?.
¿Cómo manejarán en la puesta en escena desde el incentivo de nuevas competencias, la deserción y decepción de los jugadores que no logran ser parte del sistema?
Para separar los tantos y ser realmente profesionales ¿Cuándo expondrán detalladamente quién o quiénes representan a los jugadores rentados dentro de una correcta estructura profesional?
¿Cuándo le permitirán a la prensa no oficial, hacer preguntas a los jugadores y a los dirigentes con total libertad en tiempos, formas y temas, sin tener que silenciar a los entrevistados y censurar a los periodistas?
¿Cuándo tendrá la UAR una apertura, un acercamiento y una propuesta de soluciones a los problemas de las uniones que no tienen el presupuesto de la URBA y que son parte del rugby argentino?
¿Se tiene o no en mente volver a la tradicional competencia del campeonato argentino de mayores o es causa resuelta que no se jugará por que no es viable? ¿Podrían ser claros y sinceros en ese punto?
Pensado en los periodistas que viajaron por sus propios medios al Mundial y no tuvieron la posibilidad de un mano a mano con los jugadores, ¿Cuándo la UAR jerarquizará la parte de prensa con material, predisposición camaradería y personal idóneo para mejorar un punto clave con los comunicadores del rugby de todo el país?.
¿Qué lugar y peso tienen los dirigentes que no son parte de la mesa chica del la UAR, pero pertenecen a la misma, de llevar inquietudes y reclamos válidos para el mejoramiento del rugby argentino?.
No es para alarmarse. Son interrogantes normales dentro de un rugby donde ganar también implica hacer una buena difusión, invertir, ganar, respetar, respetarse, poner en claro y en valor, lo que se mueve en materia monetaria y en calidad humana. Es una forma de que las simientes del rugby argentino sepan qué labor cumplen y qué roles tienen sus máximos dirigentes.
Cuando hablamos del otro mundial, lo hacemos porque creemos que hay más necesidades de base que deben ser atendidas y a las que se les está faltando el respeto, más en la estructura amateur que justamente nutre a la UAR de jugadores que pasan de jugar para sus clubes sin recibir dinero, a firmar contratos profesionales y jugar muchas veces en las mejores ligas del planeta.
Lo ideal es blanquear esos puntos y otros más. Respetar para ser respetados. Seguramente la posición en la que Los Pumas culminaron en esta copa del mundo, invita a seguir jerarquizado dignamente una selección que es patrimonio de una nación, de todos los clubes de rugby de Argentina, de sus seguidores, y que es espejo de un semillero (rugby infantil) que cuando crezca y comience a pensar y luego sentir, también hará sus preguntas.