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DESPEDIDA
Fin del juego para Gabriel Ascárate
EMOCIÓN PURA.
Fue el pasado sábado, que el back dejó su voz quebrada y sus emociones en lágrimas cuando piso por últimas vez la cancha del “Blanco” vestido de jugador, entre amigos y viejas glorias del rugby – “La verdad que fue un día en el que exploté de emociones y alegrías. Desde que llegue al club el sábado hasta que me fuí el domingo no dejé de recibir abrazos, anécdotas y mensajes de muchísimas gente con la cual compartí muchas cosas”- le afirmó Gabriel a TERCER TIEMPO NOA.
De amigos y emociones
“Haber juntado a tanta gente de distintos clubes y distintas edades en mi club fue un sueño. Que cada uno se haya tomado un tiempo para ir a acompañarme creo que no tiene precio”- expresó agradecido quien naciera un 27 de Octubre del 87 y con 35 años dejó su lugar difícil de ocupar para las nuevas generaciones.
¿Qué pensamientos rondaron por tu mente?
Sin dudas la primera persona que se me viene a la cabeza es mi mamá, que fue quien me llevó toda la vida a los entrenamientos y a los partidos. Es sin dudas la culpable de todo. Mis hermanos también fueron fundamentales en todo este camino. Entre los entrenadores de muy chico siempre los tengo presente a Bauli Agüero y al Negro Perondi. Me marcaron a fuego dentro y fuera de la cancha.
De recuerdos y honores
“Cuando subí a primera recuerdo a Julio Coria, Machi Ledesma, entre otros, y tuve la suerte de que en el camino hubo gente que me acompañó y aconsejó, como Coco Terraf y Pocho Basilio”- agregó quien representará a su club en Pumitas, Argentina Sub-21, Argentina A, Pumas Seven, Pampas XV, Jaguares y Los Pumas. Sin olvidar que representó a Tucumán en los seleccionados Naranjas de todas las categorías.
Gabriel también tuvo experiencias internacionales vistiendo las camisetas de Carcassone, Glasgow Warriors, Olimpia Lions y jugó para el mismísimo Toulon Francés en su visita a Tucumán.
Cuéntanos del partido…
Durante el partido me paré un rato y me di cuenta que todos los que eran mis ídolos de chico con el seleccionado tucumano. Los tenía jugando conmigo en mi despedida. Fue emocionante, ya que son cosas sinceramente las valoro muchísimo.
Saludos de todas partes
“Con respecto a los mensajes, sin dudas recibí muchísimos. Los chicos de los Pumas, Pumas seven y amigos de los distintos clubes en los que pude jugar durante mi carrera. Soy un agradecido de todo esto a mi club y a mi familia”. – finalizó.
El rugby se dice adiós a un grande. A un ganador, que mañana será un histórico. Desde el periodismo, despedimos a un ser humano que siempre nos trató con gran respeto y una enorme predisposición.
